Las mascarillas en España han pasado de ser utilizadas como un elemento totalmente accesorio, o incluso perjudicial para evitar contagios por coronavirus, a ser imprescindibles para combatir el Covid-19.
La ministra de Exteriores, Arancha González Laya, anunció ayer en "La sexta noche" que en España ya hay cuatro empresas nacionales capacitadas para fabricar 245.000 mascarillas diarias y que en los próximos días se homologarán otras cuatro empresas para que también pueden sumarse al proceso de fabricación.
González aseguró que las mascarillas se convertirán en nuestras amigas en las próximas semanas y que serán decisivas para controlar la expansión del coronavirus, como ya ha sucedido en Asia. La titular de Exteriores explicó que el Gobierno estaba diseñando medidas de orden sanitario, social y tecnológico, mediante aplicaciones móviles que nos ayuden a localizar posibles focos de contagio.
Sobre la importancia de las mascarillas para ayudar a controlar la pandemia, el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, explicó en el mismo programa que las mascarillas serán obligatorias, porque son imprescindibles para prevenir los contagios.
Revilla indicó que si la población española no había utilizado antes mascarillas era porque no había. "Tampoco había líquido desinfectante para desinfectar calles y espacios públicos", dijo. En este sentido, el presidente de Cantabria añadió que en los próximos días su Gobierno repartirá cientos de millas de "mascarillas de tela doble entre la población". El ejecutivo de Cantabria también prevé repartir líquido desinfectante entre los vecinos de la región. Revilla relató que en esta crisis sanitaria "cada Comunidad Autónoma ha tenido que buscarse la vida. En Cantabria no han llegado ni tests, ni respiradores", puntualizó.