Uno de los principales propósitos que debemos conseguir con la comunicación es llegar al público adecuado.
Un dardo de información hacia una audiencia a la que no queremos dirigir nuestro mensaje es más que gratuito contraproducente, porque elimina la intención de solucionar las cosas, es más, es un indicador de errores estructurales en la comunicación de la organización, con lo que daña la imagen.
Paso a detallar algunos aspectos que desde mi perspectiva pueden ayudar a definir correctamente nuestro público objetivo:
Autoconocimiento:
Uno de los aspectos más importantes para definir nuestro target es el autoconocimiento. Siempre hay algo que se nos escapa, pero una reflexión profunda y constante sobre qué queremos conseguir, nos ayudará a enfocar mejor nuestros objetivos. Podemos ayudarnos de herramientas como mapas CANVA o matrices DAFO. El autoengaño va desapareciendo a la misma velocidad que las veces que nos engañamos a nosotros mismos.
Comunicación con todas las audiencias.
Las audiencias nacen, no se hacen, con lo que es mejor tener un discurso personal de nuestro proyecto, darlo a conocer y que nos selecciones a nosotrxs en lugar de perfilar nuestras audiencias basándonos en nuestros propios gustos.
Si tenemos dudas sobre nuestra audiencia es adecuado hacer un análisis de nuestros círculos y observar sus perfiles, nos puede ayudar alguna estadística para unificar en datos sus características y conseguir crear un perfil de nuestra audiencia.
Estructura red.
Una visión en red de nuestra target nos informa, forma y ayuda a encontrar soluciones. Ver en cada persona que configura tu público un agente con la misma fuerza que la red completa, da valor a tu audiencia individual y audiencia de grupo.
Honestidad:
La honestidad entendida como aquella forma de comunicar, en la que no existe diferencia entre la forma de pensar y actuar.
Las instituciones buscan profesionales bien cualificados pero que no intervengan en las políticas empresariales. Es difícil, muy difícil, ser honesto en un mundo en el que nos pide repetir modelos de éxito. Y esa repetición lo único que consigue es una reproducción mecánica que hace mucho más complicada la solución al problema. Por naturaleza es inviable que el sistema de crecimiento de uno sea completamente simétrico para otro. Más bien este intento de reprogramación hacia la repetición está diseñado para crear seres productivos y autosuficientes pero no creativos.
Ser audiencia de tus audiencias.
Un claro indicador de tus audiencias es que te guste su trabajo y la forma en la que te comunicas con ellas.
Constancia y aprendizaje continuo:
Las audiencias como todo, valoran tu esfuerzo y dedicación, una audiencia orgánica te conoce en profundidad si realmente valora lo que haces, así que no te duermas en los laureles, avanza y crece como profesional y persona, quizá es de las pocas cosas que a día de hoy te permitan ser libre.
Innovar ser independiente y autosuficiente:
Es una obligación de los profesionales en la sociedad líquida, ser autosuficiente e independiente de campo, ya de por si te convierte en innovadxr, pero no olvides avanzar en técnicas y nuevos procedimientos.
Contenido:
Claro sencillo y vinculado a tu trabajo. La creación de contenido sin tener nada que contar se nota. Ve anotando tus ideas y escribe para describir algo que sea relevante.
Conocer los mercados.
Conocer los mercados en los que se mueve tu target es sinónimo de hacer bien las cosas, es necesario saber cómo funcionan para poder buscar estrategias que te ayuden a desenvolverte con soltura en tu sector.
Perder el miedo a equivocarte y romper las barreras del sector.
Para los autodidactas es nuestro método de libro, utilizarlo si eres un teórico te puede proyectar mucho del recorrido en poco tiempo, lo recomiendo sin duda. Si no te atreves busca entre tus contactos alguien que se haya atrevido para que te ayude a experimentar, tu sector lo agradece y lo necesita para avanzar.