Todo se aprende, hasta la capacidad de autorreflexión y el pensamiento crítico. (La crítica externa es directamente proporcional a la capacidad que tenemos de crítica con uno mismo, de ahí el radicalismo exponencial de los últimos tiempos).
En un taller que he estado desarrollando e impartiendo en este encierro (Del Big Brother al Big Data: Del ser asertivo al ser aséptico) , he llegado a la conclusión que el analfabetismo contemporáneo está más ligado a esta capacidad de autocrítica que al propio uso de las tecnologías, ya que este último, potencia un aprendizaje mucho más sencillo de adquirir que el primero. Rizando el rizo digo, que ambos tienen una similitud, se adquieren desde el desarrollo personal e individual, pero uno a diferencia de otro, requiere de pensamiento no inducido.
Este nuevo analfabetismo es intergeneracional y se puede mostrar en cualquier condición, sexo, creencia, ocupación y estatus social.
Normalmente esta falta de autorreflexión va ligada a una necesidad de reafirmación en un colectivo histórico y de "solidez", para equilibrar con ello nuestra falta de identidad como persona. Esta necesidad de los no reflexivos, refleja su propia identidad en el grupo, es decir carece de reflexión también en el ser grupal.
La reafirmación en símbolos denota una falta de reflexión y pensamiento individual. El rebaño necesita de este tipo de individuos.
Existen dos variedades humanas, de valor harto desigual, el hombre rebañego moderado por la tradición y la rutina y el hombre nuevo, forjado por autoreflexión. Esta variedad mental merece exclusivamente el nombre de individuo, porque solo él es capaz de aportar algo al acervo común del progreso. Definición de individuo. Ramón y Cajal. 1931.
Los estados se están desintegrando y en muchos casos es el único símbolo base de identidad personal, de ahí los autoritarismos. Quizá con una reflexión profunda desde el propio individuo se lograría mucho más.
La política debe aprender a gestionar y trabajar en silencio. «Los políticos no tienen que ser en absoluto los protagonistas de la vida social» Adela Cortina. 2020. Toda la energía en la discusión debería ser utilizada para la gestión, todos en nuestro trabajo asumimos responsabilidades que nos gustan más o menos y debemos hacerlas hasta con personas con las que no empatizamos, pensando en el avance común. Pero claro, los focos mediáticos están donde quieren y les interesa estar, porque el poder y la política se desligaron con la caída del antiguo régimen.
Un aspecto que he notado en los últimos días en las salidas (Más aún notable en los llamados policías de balcón) es como el individuo ha aceptado sin reflexión el sistema de normativización del propio estado, una cosa es que nos cuidemos y otra cosa es te señalen como potencial asesino por abrazar a un ser querido. Los individuos llevan a último término esa estricta utilización de la norma. Copian modelos de su estructura de identidad más "sólida".
Los primeros que empezaron a hablar de convergencia fueron los economistas con la entrada de España en la UE, ahora que se está replanteando el concepto de Europa, y que muchos solo entienden la comunicación con códigos económicos. Como analista social reivindicó una Convergencia Pedagógica en el rebaño, que desarrolle nuestra capacidad de reflexionar desde el propio individuo, a desarrollar nuestro propio pensamiento y criterio y nos permita conseguir una identidad personal no basada en modelos externos o símbolos.
La convergencia permite una evolución mucho más rápida de los sujetos menos autorreflexivos, es decir en poco tiempo se podrían producir transformaciones sociales muy positivas.
Es por ello por lo que considero que esta la Convergencia Pedagógica se considere un servicio esencial en nuestra sociedad.
Vengo notando desde la salida del confinamiento un cambio en el lenguaje publicitario, que me sirve como indicador o catalizador del pensamiento en grupo.
La publicidad está utilizando mensajes mucho más directos enfocándose en la identidad de rebaño y que en muchos casos me parece propagandística. Este estilo de comunicación da por sentado una reafirmación en el grupo que me recuerda a muchos aspectos del pasado más oscuro de la humanidad.
La identidad y reflexión del individuo deja de ser utilizada en algunos medios de captación de clientes. Los mensajes dejan de personificarse para ser lanzados al colectivo uniforme.
A este tipo de marketing directo y que tiene como receptor al rebaño lo he denominado #sadomarketing.
Os muestro algunos ejemplos significativos.
En definitiva, se avecinan tiempos inciertos en los que desde mi perspectiva debemos realizar un gran esfuerzo en la concienciación social de todos los elementos necesarios para desarrollarnos como individuos críticos y con criterio.
Tener identidad individual y pensar en el grupo, no es lo mismo que pensar en el grupo para tener identidad como persona. Y esto es una responsabilidad no solo de trabajadores sociales, artistas, comunicólogos, creadores, educadores, etc, sino de todos en el día a día, en nuestra forma de comportarnos con los demás y de analizar el contexto.