Lejos están los tiempos en que el uso de mochilas estaba considerado ser para viajeros de bajo presupuesto o de hosteles. Cada vez son más los viajeros que optan por la mochila para acompañarla en sus viajes y ya no se trata de una cuestión de presupuesto, sino de varios factores como pueden ser el destino, la movilidad que tendremos en él y de qué forma tenemos organizado nuestro viaje.
A continuación os haré un pros y contras de usar maleta o mochila en nuestros viajes.
MALETA
Espalda libre de peso:
Lo primero que se nos ocurre cuando pensamos en una maleta al invés de una mochila es que libramos nuestro cuerpo de un peso extra que podamos cargar. En este sentido, la maleta gana ventaja.
Comodidad:
Aliado al punto anterior, se le suma la comodidad ya que al no llevar un peso encima vamos más cómodos en nuestro viaje.
Mayor protección:
La mayoría de las maletas hoy en día dispone de una estructura externa rígida que protege mucho más nuestras pertenencias que el tejido que normalmente cubre las mochilas. También es cierto que viendo como tratan nuestros equipajes sobre todo en aeropuertos esto es un punto a tener muy en cuenta.
Más ruidosa:
Si bien es cierto que usar una maleta puede resultarnos más cómodo, no lo es tanto para los ciudadanos residentes en los lugares que visitamos que tienen que escuchar como decenas de maletas circulan diariamente por las calles haciendo ruido. En Venecia llegó a prohibirse el arrastrar las maletas por las calles con multas que iban desde los 100€ a los 500€. A veces hay que pensar que nuestras comodidades afectan también a los demás.
Difícil Acceso:
Una maleta al no tener la posibilidad de tener tantos bolsillos como una mochila, se dificulta más el acceso a nuestras pertenencias.
MOCHILA
Transportabilidad:
Al ser un objeto que siempre va contigo su transportabilidad es mucho más fácil que la de una maleta. Asimismo, si optas por destinos múltiples, o pretendes cambiar de sitio muchas veces, es lo más adecuado.
Libertad de movimientos:
El hecho de llevarla en la espalda te permite tener las dos manos libres para cualquier cosa, luego una mayor libertad de movimientos.
Almacenamiento:
Al ser más maleables, se guardan con más facilidad y ocupan mucho menos sitio que una maleta, sobre todo si esta es de estructura rígida.
Fácil acceso:
Las mochilas de trekking suelen tener la cremallera principal de acceso al interior de la misma, pero también una serie de bolsillos exteriores que nos facilitan mucho la organización de nuestras pertenencias y el rápido acceso a lo que queremos, sobre todo si lo dejamos en los bolsillos de fuera.
Aptas para cualquier destino:
Con una mochila sabes que siempre vas a acertar vayas a qué destino vayas. Hay que tener en cuenta que no todos los destinos que elegimos tienen un buen suelo para arrastrar nuestras maletas sin que se dañen considerablemente. Con una mochila esto no te va a pasar jamás, una vez que va contigo a la espalda y te permite moverte por cualquier parte sin percances.
¿Cuál es la mejor opción?
En mi opinión no existe mejor opción. Yo creo que puede variar según el destino que elijas y el plan de viaje que tienes en mente. Yo dejaría la maleta para viajar a países más desarrollados, con un buen suelo, o incluso para un destino donde sepas que vas a alojarte en el mismo hotel durante todos los días de tu viaje, que sepas que no tienes que tocar esa maleta hasta el día de tu partida.
La mochila se guarda para destinos asiáticos o africanos o incluso si sabes que vas a visitar varios lugares diferentes a lo largo de tu viaje. Vas a tener tus pertenencias siempre contigo, vas a estar más cómodo, con las manos más libres y sin preocupaciones de tener que rehacer la maleta cada vez que estés de partida para otro lugar. También hay que tener en cuenta que muchos destinos, incluso europeos, no disponen, por ejemplo, de ascensores o escaleras mecánicas en los transportes públicos, o incluso en los mismos hoteles por lo que debes tenerlo en cuenta porque si llevas maleta vas a tener que cargarla en brazos y te va a resultar mucho más incómodo que una mochila en la espalda.
Para este mi viaje (pronto sabréis cuál es) he optado por la mochila primero porque no es un destino europeo, y luego porque cada día voy a estar en un sitio diferente por lo que la mochila me resultará más cómoda para desplazarme de un lugar a otro.
Espero que os haya gustado el post y os haya ayudado a decidir qué tipo de equipaje elegir para vuestro próximo viaje.
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Hasta el próximo post ♥