Las bases de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) se sentaron oficialmente el 4 de abril de 1949 con la firma del Tratado del Atlántico Norte, más conocido como Tratado de Washington.
El Tratado del Atlántico Norte, también conocido como el Tratado de Washington, es la base fundacional de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Fue firmado en Washington D.C. el 4 de abril de 1949 por 12 países fundadores. Este tratado establece los principios y valores fundamentales de la OTAN, cuyo objetivo principal es garantizar la seguridad colectiva y la cooperación en defensa entre los países miembros.
A continuación, algunos aspectos clave del Tratado del Atlántico Norte:
Defensa Colectiva: El corazón del Tratado es el Artículo 5, que compromete a los miembros a protegerse mutuamente en caso de un ataque armado. Si un país miembro es atacado, se considera un ataque contra todos, y los demás miembros deben actuar en solidaridad para restablecer la seguridad en la región del Atlántico Norte.
Brevedad y Flexibilidad: A pesar de contener solo 14 artículos, el Tratado es un documento conciso y flexible. Nunca ha sido modificado desde su creación original, y cada país miembro puede implementarlo según sus capacidades y circunstancias.
Valores y Principios: El Tratado se basa en los principios de la democracia, las libertades individuales y el imperio de la ley. Los países miembros se comprometen a resolver disputas de manera pacífica y a fortalecer las relaciones internacionales.
Las tensiones entre las potencias soviéticas y occidentales después de la Segunda Guerra Mundial llevaron a una división “Este-Oeste”. Eventos como el bloqueo de Berlín y el golpe en Checoslovaquia aumentaron las preocupaciones sobre la imposición de la ideología soviética en Europa. Para fortalecer la defensa, Bélgica, Francia, Luxemburgo, los Países Bajos y el Reino Unido firmaron el Tratado de Bruselas en 1948, creando la Unión Occidental.